• Agro nacional aparece como fortaleza exportadora que genera millones de dólares en divisas, pero concentrada en pocas manos, dice.
Irineo Pérez Melo/
Xalapa, Ver., 15 de septiembre del 2024.- A pesar de que el campo en México es generador de riquezas, los productores viven en la pobreza, por el abandono que sufren por parte del gobierno de la República, aseguró Moisés Reyes Fausto, secretario general de la Central Campesina Cardenista (CCC).
En un análisis que hace en el marco del Día Mundial de la Agricultura, Identidad y Cultura Campesina, que se celebra el 9 de septiembre, el dirigente campesino, destaca que el agro mexicano aparece como una fortaleza exportadora que genera millones de dólares en divisas, pero que están concentradas en pocas manos de empresas agroexportadoras que en nada benefician a los productores mexicanos salvo como alquiler de su mano de obra como jornaleros agrícolas.
Expone que la celebración del Día Mundial de la Agricultura en México es solo una fecha en las efemérides, pues los productores agropecuarios mexicanos no tienen nada que celebrar, porque a pesar del esforzado trabajo que realizan en el campo para producir alimentos, “viven al día, sin ninguna esperanza de que las cosas van a cambiar y que por más esfuerzo que hagan su situación económica no mejorara en el mediano plazo”.
Consideró que la gran mayoría de los productores cada día viven en pobreza, sin apoyos gubernamentales para fomentar la producción, al desaparecer éstos, trayendo consigo que en los últimos cuatro años ha disminuido la productividad en el campo y se ha incrementado la dependencia alimentaria en granos básica y carnes en un 56%, importando alrededor de 32 millones de toneladas de maíz, frijol, arroz, trigo, soya, etcétera.
A su juicio, comentó que esta situación se debe principalmente a que el presupuesto que antes estaba destinado para aumentar la productividad, fortalecer la infraestructura, la capacitación y transferencia de tecnología y la sanidad e inocuidad agroalimentaria, fue eliminado por el gobierno, al disminuir el presupuesto en un 33% pasando de 74 mmdp a 49 mmdp, desapareciendo 17 programas que han afectado a los productores mexicanos.
Además, indica que la falta de inversión de créditos accesibles para impulsar las actividades productivas de las más de 4.4 millones de unidades productivas que existen en el medio rural, de las cuales solo un 60% se encuentran en actividad.
De igual manera, admitió que una parte del sector de los pequeños productores de autoconsumo tiene algún apoyo de los 2 únicos programas que existen, Sembrando Vida o Producción para el Bienestar, hay un sector importante de pequeños productores que arriesgan sus ahorros y su patrimonio familiar para realizar actividades agrícolas y pecuarias en la producción de maíz blanco, forrajero y elote, papaya, calabacita, pepino, chiles, piña, limón, naranja, lichi, mango, coco, café, cacao, carne bovina, porcícola, leche, queso, entre otros.
Aunado a lo anterior, el productor aparte de no contar con ningún tipo de apoyos, es presa constante de los (coyotes) intermediarios que gozan de cabal salud a pesar de la 4T, además de cobro de piso, extorsiones y robos de productos por grupos del crimen organizado radicadas en las regiones productoras del país.
Ante este panorama, urgió a las próximas administraciones federal y estatal a establecer mecanismos y programas de apoyo para fomentar la producción agropecuaria, además de una política en materia de desarrollo rural sustentable que propicie el desarrollo de las y los productores agropecuarios, concluyó.