• Piden la intervención de la gobernadora Rocío Nahle, para que la Sedaatu lleve a cabo el deslinde y su colonia no se incluya en el litigio que se tiene con un alemán.
Irineo Pérez Melo/
Foto: Agencia
Militantes de la Central Independiente de Obreros Agrícolas y Campesinos (CIOAC), que mantenían en posesión predios en Sierra de Agua del municipio de Coatepec, se manifestaron en la Plaza Sebastián Lerdo de Tejada, frente a palacio de gobierno, para exigir la devolución de las tierras de donde fueron desalojadas el pasado 21 de febrero del año en curso.
A nombre de los desalojados, la activista Yerania Valencia expresó que el grupo de campesinos fue desalojado de sus tierras de manera brutal el pasado 21 de febrero del año en curso, sin notificación previa y con lujo de violencia por parte de más de 400 policías.
Expresó que en la acción fueron desalojadas más de 50 familias del predio mencionado, las cuales fueron brutalmente golpeadas y reprimidas por la policía estatal, marinos y policías municipales, utilizando para ello gas lacrimógeno, causando lesiones a los campesinos y por el uso del gas, dos personas resultaron muertas.
De ese total, ocho familias se quedaron a vivir en la parte de enfrente de la entrada del predio, pues no tienen en donde vivir, debido a quien se dice propietario del predio, lo cercó totalmente y no deja pasar a nadie.
En de señalar que la tierra en disputa abarca dos mil hectáreas y ha sido punto de contención durante muchos años, acusando a las autoridades de estar compradas por el alemán Aris Sebastián Bridman, quien supuestamente adquirió las tierras de manera ilegal.
Por este motivo, los campesinos afectados pidieron la intervención de la gobernadora Rocío Nahle García, para que se realice un deslinde de propiedades, ya que las tierras habían sido solicitadas al gobierno federal, petición que fue publicada en el Diario Oficial de la Federación y en la Gaceta Oficial desde 1976.
Y es que el problema está sin resolverse porque la secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), se ha negado a llevar a cabo el deslinde y miente, porque los funcionarios tienen capacidad para hacerlo o no quieren hacerlo, por lo que de persistir este problema y no intervienen, se pueden dar hechos sangrientos, que empañen la tranquilidad que se vive actualmente en la zona.
Por eso se está pidiendo a la Sedatu realice el deslinde de los terrenos, para que los campesinos afectados puedan habitar las 24 hectáreas donde mantenían la colonia, de la que fueron desalojados, supuestamente porque el alemán compró todo el predio.